En un comunicado, el Senador Manuel Virgüez expresó, según él, la necesidad que tiene el país de profesionalizar sus fuerzas militares a través de un servicio militar voluntario.

Tras los recientes hechos en los que fenecieron 11 soldados regulares en un ataque en el departamento de Arauca, se agudiza la necesidad de contar con militares y policías profesionales, bien remunerados.

“Ninguno de los golpes contundentes que las Fuerzas Armadas de Colombia le han dado a los grupos delincuenciales se han llevado a cabo con soldados bachilleres o regulares que están prestando el servicio militar obligatorio; por el contrario, han sido los sacrificados del conflicto interno que vive nuestro país” afirmo Virgüez.

La jurisprudencia del Consejo de Estado afirma que “El Ejército no podrá enviar a combates a soldados regulares, sino profesionales, quienes cuenten con la formación necesaria para este tipo de prácticas militares”.

De igual forma la Corte Constitucional ha protegido, en varias sentencias, la objeción de conciencia de los jóvenes para no prestar el servicio militar obligatorio: por vía de tutela, los colombianos podrán, siempre y cuando existan argumentos “profundos fijos y sinceros”, solicitar el amparo de sus derechos y no ser obligados a ingresar a las filas.

Según Virgüez “el reconocimiento del conflicto interno por parte del Presidente Santos debería conducir al desmonte del Servicio Militar Obligatorio para no continuar con la excusa de las “lecciones aprendidas” que han cobrado la vida de miles de colombianos sin que hubiéramos aprendido.